Doctrina Reformada

Justificación

Introducción
1. Vida Eterna
2. Calvinismo
3. Justificación
4. Santificación
5. Carácter
6. Historia
7. Conf. de fe Westminster, 1646
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Una Exposicion de la Confesion de Fe de Westminster 

R. Shaw

Capitulo XI.  De la Justificacion

Seccion I. Aquellos a quien Dios efectivamente llamo, El tambien libremente los justifico: no por la infusion de justicia en ellos, sino por el perdon de sus pecados, y por acreditar y aceptar sus personas como justas; no por algo forjado en ellos, o hecho por ellos, sino solamente por los meritos de Cristo; ni por imputarles la Fe en si misma, el acto de creer, o cualquier otra obediencia evangelica en ellos, como su propia justicia; sino mas bien por imputarles a ellos la obediencia y satisfaccion de Cristo, asi ellos reciben y reposan en El y en su justicia por la Fe; Fe, por la cual ellos no tienen por si mismos, porque es un don de Dios.

Seccion II. La Fe, asi recibida y reposada en Cristo y su justicia, es el unico instrumento de justificacion; aunque esta no esta sola en al persona justificada, sino que esta siempre acompanada de todas las otras gracias salvificas, no siendo una Fe muerta sino mas bien una Fe que obra por el amor.

Exposicion:

La doctrina de Justificacion por la Fe mantiene un lugar muy importante en el sistema cristiano. Este ha sido calificado con mucho acierto por Martin Lutero, articulus standis vel cadentis ecclesiae ,-la prueba de caida o permanencia de la Iglesia- En la iglesia de Roma esta doctrina fue grandemente corrupta; y fue a travez de la predicacion escritural de la doctrina de la justificacion, en que se llevo a cabo la reforma de la iglesia papal. Sin embargo, Aun en las Iglesias protestantes, muchos errores perniciosos de esta doctrina han sido ampliamente diseminados, y en diferentes periodos han producido controversias bastante amargas. En nuestra Confesion de Fe, la doctrina escritural de la justificacion es discriminada con bastante acierto de las varias formas de error; en el progreso de nuestra exposicion, senalaremos los errores a los cuales las declaraciones de la Confesion de Fe se oponen.

I. La Justificacion es un acto judicial de Dios, no es un cambio de naturaleza, sino mas bien un cambio de estado del pecador, con relacion a la ley. La iglesia de Roma confunde justificacion con santificacion, y representa la justificacion como un acto fisico, que consiste en la infusion de justicia en las almas de los hombres, haciendolos interna y personalmente justos. aunque la justificacion y la santificacion estan inseparablemente conectadas, estas son totalmente distintas, el combinarlas pervierte ambos, la ley y el evangelio. La Justificacion, de acuerdo al uso de la palabra en la escritura, debe ser entendida forensicamente; es un termino legal, derivado de las cortes de jurisprudencia humana, y significa, no el hacer a una persona justa sino mas bien, declarandola y manteniendola justa delante de la ley. El sentido forense de la palabra se manifiesta por ser frecuentemente opuesta a condenacion. Deut. 25:l; Prov. 17:15; Rom. 5:16, 8:33, 34. Condenacion no yace en infundir maldad a un criminal, o en hacerlo culpable, sino en declararle sentencia de acuerdo a su transgresion de la ley; asimismo justificacion no yace en infundir justicia a una persona, sino mas bien en declararla justa en acuerdo al ambito legal; y como la sentencia de un juez, es hecha solo una vez.

Socianos, y algunos otros, representan la justificacion solo como el perdon de pecados. En oposicion a esto, nuestra Confesion de Fe declara que Dios justifica a aquellos a quien El efectivamente llama, no solo "para perdonar sus pecados," sino tambien "por aceptar y acreditar su persona como justa". El perdon de los pecados es incuestionablemente una parte importante de la justificacion. Este consiste en quitar la culpa, o absolver al pecador de su obligacion al castigo de la pena, bajo la cual el esta, en virtud a la sentencia de la ley violada. El perdon que Dios otorga es total y completo. Esto incluye todos los pecados, sean ellos numerosos, y se extiendan a sus mas altos agravantes, o sean ellos enormes. Asi dice el Senor, "perdonare todas las iniquidades por las cuales han pecado, y por las cuales ellas han transgredido contra mi". Jer. 33: 8. Todos los pecados de los creyentes son perdonados de una vez en su justificacion; sus pecados pasados son formalmente perdonados, y sus futuros pecados no seran imputados, para que no entren en condenacion. Salmos 32:1,2; Juan 5:24. El perdon de pecados, solamente restaura al creyente al estado de prueba, del cual Adan cayo; y aunque el no estaria bajo ningun cargo legal de culpabilidad, tampoco tendria ningun un titulo legal para obtener la vida eterna. Pero cuando Dios justifica al pecador, no solo lo absuelbe de la culpa de su pecado, o lo salva de la condenacion eterna; El lo declara justo y como tal, capacitado para vida eterna. Por  tanto a esto se ha llamado justificacion de vida;  y aquellos que reciben el don de justicia, reinaran en vida por uno solo, Jesus Cristo.  Rom. 5:. 17,18.

II. Ningun hombre puede ser justificado delante de Dios, enteramente o en parte, en la base de su propia justicia personal. Romanistas, Socianos, and Pelagianos, mantienen que somos justificados, ya sea por una justicia propia en nosotros, o por nuestras buenas obras. en oposicion a esto, nuestra Confesion de Fe, ensena que "no son justificados por nada forjado en ellos, o hecho por ellos, sino por los meritos de Cristo solamente".  Que no podemos ser justificados por una justicia propia en nosotros, es manifiesta:

1. Porque solamente podemos ser justificados en al base de una perfecta justicia, y nuestra propia justicia es imperfecta; ya que la escritura dice, "No hay hombre que nunca peque." Reyes 8:46.

2. Porque la justicia por la cual somos justificados no es nuestra. Filipenses 3:9. 

3. Porque, la sentencia de justificacion debe, en el orden natural, no de tiempo, preceder la implantacion de la santidad.

4. Porque, si fueramos justificados por una justicia propia en nosostros mismos, no podriamos decir que Dios "Justifico al impio". Rom. 4:5.

El que no podamos ser justificados por nuestras propias obras, no es menos manifiesta;

1. Porque nuestra obediencia personal queda muy corta en los requerimientos de la ley. La ley demanda obediencia perfecta; porque "todos ofendemos muchas veces". Sant.3:2.

2. Porque, si nuestra obediencia, alcansace las altas demandas de la ley, no podria satisfacer nuestros pecados pasados. La ley require, no solo el cumplimiento de este precepto, sino tambien el castigo o pena que esta demanda: "Porque sin derramamiento de sangre no hay perdon de pecados". Heb. 9:22.

3. Porque, somos justificados libremente por su gracia, y sabemos que la gracia y las obras estan diametralmente opuestas. Rom. 3:24, 11:6.

4. Porque justificacion por obras no solo hace la gracia de Dios en vano, sino tambien hace la muerte de Cristo sin ningun valor, y sin nigun efecto. Gal. 2:21.

5. Porque somos justificados de tal manera, que esta nos excluye de gloriarnos a nosostros mismos. Rom. 3:27.

6. Porque la justificacion por obras esta en directa contradiccion al uniforme testimonio de la escritura. El apostol Pablo discute la justificacion en sus Epistolas a los Romanos y a los Galatas; en ambas Epistolas el explicitamente declara, que "por las obras de la ley ningun hombre sera justificado delante de de Dios." Rom. 3:20; Gal. 2:16. En respuesta a este argumento, este ha sido muy a menudo explicado, que las obras a las cuales el apostol se refiere y excluye como base de justificacion del pecador delante de Dios son solo las leyes ceremoniales, no las leyes morales. Este "ingenioso cambio", dice Calvino, los "disputantes disputando" de su tiempo prestaron de Origenes y otros antiguos escritores; el declara que esto es "muy tonto y absurdo" y llama a sus lectores a "mantener esto por cierto, que aqui se esta hablando de la ley en su totalidad, especialmente cuando el poder justificante es tomado aparte de la ley." "La referencia," dice Mr. Haldane, "es a toda la ley que Dios ha dado al hombre, ya sea expresada en palabras o impresas en el corazon. Esta es la ley la cual los gentiles han transgredido, la cual tienen naturalmente inscrita en sus corazones. Esta es la ley la cual los judios han violado, cuando cometieron robo, adulterio y sacrilegios, la cual los convicto de su impiedad, del mal hablar, de la calumnia, del homicidio , de la injusticia. En una palabra, esta es la ley la cual calla al mundo entero, como ha sido dicho en el verso que lo precede, y "trae a todo hombre culpable delante de Dios."

Otros han contendido que las obras a las cuales el apostol excluye de parte alguna en nuestra justificacion son meramente obras no hechas en fe. Esta alegacion es igualmente sin base; ya que el apostol excluye las obras de forma general, toda clase de obras, sin distincion o excepcion (Efe. 2:9, 10); aun los mas imminentes santos niegan toda dependencia en sus propias obras,  y desprecian en lidiar en acuerdo a sus mejores rendimientos. Salmos 143:2; Fil. 3:8, 9.

Los Arminianos mantienen que la fe misma, o el acto de creer, es aceptado como nuestra propia justificante justicia. En oposicion a esto nuestra Confesion ensena, que Dios no nos justifica "por imputarnos la fe en si misma , el acto de creer, como nuestra justicia." Y en confirmacion a esto, observamos, que la fe, como un acto hecho por nosotros, es una obra de obediencia a la ley como cualquier otra, y por lo tanto, ser justificado por el acto de la fe, seria ser justificado por obras.

Pero esto es contrario a los declaraciones expresas en la Escritura, que excluyen toda clase de obras en el asunto de la justification.Gal. 2:16, Además, la fe se distingue plenamente de la justicia con la cual somos justificados. Leemos "de la justicia de Dios que es por la fe de Jesús Cristo;" y "de la justicia que es de Dios por la fe." - Rom. 3:22; Fil. 3:9. Ningun expresion podría demostrar más claramente que la justicia y la fe son dos cosas diferentes. "nada," dice Haldane, "puede ser de mayor corrupción a la verdad que representar la fe en sí misma en lugar de la justicia, o ponerla como la "justicia" que salva al pecador. La fe no es justicia. La justicia es el cumplimiento de la ley."

Neo-nominianos alegan, que aunque no podemos satisfacer esa obediencia perfecta que las obras de la ley demanda, con todo le ha complacido a Dios, por causa de Cristo, darnos una nueva ley, según la cual, la obediencia sincera, o fe, y el arrepentimiento, son aceptadas como la propia justicia que nos justifica. Aqui podemos remarcar, que la Escritura en ningun lugar da la mas ligera insinuacion que una ligera o "casi ley" haya reemplazado las obras de la ley dadas originalmente a los hombres. Cristo no vino a abrogar o sustituir la ley sino mas bien a satisfacerla y cumplirla

El evangelio nunca fue diseñado para enseñar al pecador que Dios ahora aceptará una obediencia sincera en lugar de una obediencia perfecta, sino mas bien para dirigirlo a Jesús Cristo "el fin de la ley para justicia a todo aquel que cree." La idea de una nueva ley, adaptada a la actual condición de la naturaleza humana, refleja la deshonra más grande a la ley y al que dio la ley; porque ella asume que el que dio la ley es mutable, y que la ley dada al principio al hombre exigia demasiado.
III. La justicia de Jesús Cristo es la unica base para la justificación del pecador delante de Dios. No estamos refiriendonos al atributo de su Santa Justicia  que Cristo tiene como Dios, porque que esta es incomunicable; sino a su mediatorial o segura-justicia, que, según nuestra Confession de fe, consiste en su "obediencia y satisfacción." Que el pecador está justificado solamente en esta base puede ser demostrada por una infinidad de pruebas. Nadie puede ser justificado sin una perfecta justicia; debido a que las demandas de la ley no pueden ser puestas a un lado o disminuidas. El juicio del dios, en pronunciar al pecador justo, no estaría según la verdad, a menos que la sentencia fuera fundada sobre una justicia adecuada a los requerimientos de la ley. En el antiguo testamento, el Messias se menciona bajo este apropiado nombre, "El Señor nuestra Justicia" (Jer. 23:6); y se predijo que El deberia "traer una eterna justicia." Dan. 9:21. En el nuevo testamento, dice que Cristo "es  hecho justicia para nosotros;" y que nosotros seríamos "hechos justicia de Dios en El." 1Cor. 1:30; 2 Cor. 5:21. Se ha dicho que "por la obediencia de uno los muchos serán hechos justos," y que "por la justicia de uno, la dadiva viene sobre todos los hombres para justificación de vida." Rom. 5:18, 19.
IV. Los pecadores obtienen el beneficio de la justicia de Cristo, para su justificación, por medio de Dios que se las imputa, y su recibimiento por la fe. La doctrina de la imputación de la justicia de Cristo es rechazada, no solo por Romanistas y Socianistas, sino por autores de amplios y diferentes sentimientos, observese, que alegamos por la imputacion de la justicia de Cristo en si misma, y no solamente sus efectos. "decir que la justicia de Cristo, esto es, su obediencia y sufrimientos, han sido imputadas solo por sus efectos, es decir, que solo tenemos el beneficio de ellos, y nada mas, de esta manera la imputacion en si misma es negada, asi es como los Socianos dicen; pero ellos bien lo saben e ingenuamente reconocen, que han derribado toda verdad, incluyendo la real imputacion." Los efectos de la justicia de Cristo son comunicados a nosotros en la base de la imputacion de su justicia en si misma; pero los efectos son realmente impartidos, y no imputados. Muchos, segun sabemos, se oponen a la doctrina de la imputacion, debido al concepto equivocado de la interpretacion de la naturaleza del termino. Esta no significa la infusion de la santa naturaleza, o la transferencia actual de la santa y eterna justicia de Cristo a los creyentes, a fin de que esta llegue a ser inherente y subjetivamente suyas, eso es imposible; mas bien el significado es, que Dios acredita la justicia de Cristo a su favor, y en consideracion a esto, los trata como si fueran justos. Dios no acredita que ellos lo desempenen o lo realizen por si mismos, lo cual seria un juicio en desacuerdo con la verdad; sino que El se los acredita para su justificacion. "Hay ciertos terminos tecnicos en teologia," dice el Dr. Chalmers, " los cuales son usados cotidianamente, de tal manera que estos fracasan de recalcar su propio significado en el proceso de las ideas. El termino "imputar" es uno de ellos. Este puede mantener una revelacion de su sentido simple, cuando es ligeramente mencionado que el termino imputar en el verso seis de Romanos capitulo cuatro, es el mismo en el original con el que es empleado en el verso del libro de Filemon cuando Pablo dice, "si el te ha fallado o te debe algo, ponlo en mi cuenta." El imputar justicia a un hombre sin obras, es simplemente acreditar justicia a su favor, aunque el no haya hecho obras de justicia."
La doctrina de la imputacion de la justicia de Cristo es claramente ensenada en la Escritura. Somos representados al haber sido constituidos justos por la obediencia de Cristo, de la misma manera que somos constituidos pecadores por la desobediencia de Adam; esto solo puede ser hecho por la imputacion, Rom. 5:19. Tambien se nos dice de ser hechos justicia de Dios en Cristo, cuando el fue hecho pecado por nosotros; y esto, de igual manera, puede ser hecha solo por imputacion, 2 Cor. 5:21, se nos dice expresamente que Dios imputo justicia sin obras, Rom. 4:6. Esta imputacion procede sobre la base de la union federal con Cristo desde la eternidad, y de su union vital con El al momento de creer. Cristo como el seguro generador de su semilla espiritual, se comprometio desde la eternidad a cumplir esta justicia, El la completo en su naturaleza, y ambiente; y cuando ellos llegaron a ser vitalmente unidas a El por el Spiritu y por la Fe, Dios benevolentemente acredito la justicia de Cristo a ellos para su justificacion.
V. La fe es el unico instrumento de la justificacion del pecador. Que somos justificados por la fe es frecuente y expresamente declarado en las Escrituras, y nadie que profesa recibir la Palabra de Dios como regla de su fe puede aventurarse a negarlo. Hay diferentes y muchas opiniones, con respecto al oficio de la fe en la justificacion del pecador. Algunos dicen que un pecador es justificado por la fe, como si esta fuese un acto realizado por el; como si la fe vino en lugar de la perfecta obediencia, requerida por la ley, esto ya lo hemos desaprobado; y "es muy bien conocido", dice Witsius, "que las iglesias reformadas condenaron a Arminius y sus seguidores por decir que la fe viene a ser considerada, en la materia de la justificacion, como una obra o acto de nosotros mismos." Algunos otros han dicho, que la fe debe ser considerada como una condicion de nuestra justificacion. La "condicion" de algo usualmente significa que esto que ha sido hecho, nos da automaticamente un derecho y titulo de participacion a esto mismo, porque este posee por si un merito intrinseco o un merito convencional. El llamar la fe en este sentido, la condicion de nuestra justificacion, intruducira merito humano, para el deshonor de la divina gracia, esto subvertiria totalmente el evangelio. Algunos buenos estudiantes de la biblia han llamado a la fe una "condicion", (aunque estos estuvieron lejos de la opinion que esta sea una condicion propiamente dicha); en la funcion del cual los hombres deberian, de acuerdo al pacto de Dios, tener el derecho a la justificacion como  recompensa. La intencion de ellos simplemente fue, que sin fe no podemos ser justificados y que la fe precede a la justificacion en el orden cronologico o natural. Pero como el termino "condicion" es muy ambiguo, y podria a desviar al ignorante, este deberia ser evitado. Otros han dicho que la fe justifica, a la vez que es alimentada y animada por la caridad, este es el lenguage de los romanistas; y en este momento preciso podriamos usar las palabras del heroico campeon de la reforma. comentando Gal. 2:16, el dice: "Este es el verdadero medio de llegar a ser un Cristiano, ser justificado por la fe en Cristo, y no por las obras de la ley, aqui debemos permanecer, no sobre los malos argumentos de los escolares de la biblia, que dicen, que la fe justifica solo cuando la caridad y las buenas obras son reunidas, con este pestilente argumento, estos sofistas han obscurecido y corrompido esta y otras sentencias de Pablo, donde el establece y atribuye justificacion solo en Cristo. Pero cuando un hombre es ensenado que el podria creer en Cristo, y aun establecer, que la fe no justifica a menos que esta sea formada y acondicionada con la caridad, y si no es asi el pueda caer de la fe, y luego el razone asi: "si la fe sin caridad no justifica, luego la fe es vana y sin valor, y la caridad sola justifica; porque excepto la fe sea formada con la caridad, esta no es nada...", por lo tanto debemos de rechazar este argumento como el mas letal veneno diabolico, y concluir con Pablo, "que somos justificados, no por la fe acomodada con la caridad, sino por la fe sola y solamente."
En oposición a estas posiciones de la relación que la fe lleva a la justificación, nuestra Confesion de fe enseña que la "la fe, recibida y basáda en Cristo y su justicia, es el unico instrumento de la justificación." Algunos han malinterpretado esta expresión, como si significara que la fe es el instrumento por el cual Dios justifica. La intencion nunca fue de que la fe fuese un instrumento a funcionar en el campo de accion de Dios, sino mas bien en el nuestro. Algunos también han hablado sin exactitud de la fe como el instrumento por el cual recibimos la justificación. La fe es más correctamente expresada como el instrumento por el cual recibimos a Cristo y su justicia. Nuestro Confesion enseña claramente, esa fe es "el instrumento de la justificación," solamente mientras que "se recibe y se basa en Cristo y su justicia." Ésto, según Sr. Traill, es "la vieja y simple doctrina protestante, que el lugar de la fe es solo como el de una mano o el de un instrumento que recibe la justicia de Cristo, por el cual solamente somos justificados." El lenguaje del evangélico moderno esta enteramente de acuerdo con esta "vieja doctrina protestante."  "La fe," dice el  Sr. Haldane, "no justifica como acto del justicia, sino como el instrumento por el cual recibimos a Cristo y su justicia." "cuando leemos que somos justificados por la fe," dice el Dr. Chalmers, "uno debe entender que la fe es simplemente el instrumento por el cual nos apropiamos de ese gran privilegio." "como la mano, se dice es para alimentarnos," dice el Dr. Colquhoun, "ya que este es el instrumento de llevar el alimento al cuerpo; asi que la fe justifica, como la mano o el instrumento de aplicar la justicia del Redentor a nuestras almas."
Debe ser observado cuidadosamente, que nuestra Confesion no describe  simplemente la fe como el instrumento, sino como el unico instrumento de la justificación. Esto va directamente contra un error de los Romanistas, que mantiene que la esperanza, el amor, y el arrepentimiento, estan incluidas la fe como justificantes, y que concurren con la fe. Que somos justificados solo por la fe, esta probado por argumentos tales como éstos: - estamos justificados por la fe, en la oposición a las obras ( Rom. 4:2, 3), la fe solo recibe y aplica la justicia de Cristo; somos justificados libremente por su Gracia, y por lo tanto solo por la fe, siendo este "solo" consistente son solo por su Gracia(Rom. 3:24, 4:16); Abraham obtuvo la bendición de la justificación solo por la fe, y el fue designado como un patrón de la manera por lo cual todos los otros, en tiempos posteriores habrian de ser justificados. Gal. 3:6-9.
Los defensores de la doctrina de la justificación solo por la fe fueron ampliamente calumniados, como si ellos hubiesen negado la necesidad de las buenas obras. Para cubrirnos contra esta mala y perjudicial representación, nuestro Confesion enseña, que aunque la "fe es el unico instrumento de la justificación, con todo no está sola en la persona justificada." La fe que justifica es un principio vivo y activo, que obra a travez del amor, purifica el corazón, y lo inclina a la obediencia universal. Esta acompañada con cada gracia cristiana, y es productiva con buenas obras. las "obras," dice Lutero, "no se toman en consideración cuando la pregunta es con respecto a la justificación. Pero la fe verdadera no dejara de producir las buenas obras, de la misma manera  en que el sol no cesara de dar su la luz." Esto sugiere una distinción, que nos permite quitar la discrepancia aparente entre los Apostoles Pablo y Santiago; aunque nos abstenemos de entrar en ese tema por ahora.
Seccion III. Cristo, por su obediencia y muerte, canceló completamente toda la deuda de todos aquellos que son  de esta manera justificados, e hizo una adecuada, real y completa satisfacción a la justicia de su Padre, en favor de ellos. Sin embargo, puesto que por ellos, Cristo fue entregado por el Padre; y puesto que su obediencia y satisfaccion fue aceptada en lugar de la de ellos; y ambas gratuitamente, no por cosa alguna que haya en ellos; entonces su justificacion es solo por pura gracia; para que tanto su estricta justicia, asi como su la rica gracia de Dios, sean glorificadas en la justificacion de los pecadores.
Exposicion:

Los Socianos niegan que Cristo llevo a cabo una propia y real satisfaccion a la justicia divina en favor de sus escogidos; su objecion a esta doctrina es, que esta no da cabida al ejercicio de la gracia en la salvacion de los pecadores. Muchos escritores modernos, de orientacion teologica diferente, niegan que Cristo satisfizo la justicia retributiva, e insisten que solo satisfizo la justicia publica; consecuentemente, ellos mantienen, que Cristo no pago la deuda de aquellos a ser justificados, ni hizo una satisfaccion propia a su favor. Es mas, ellos mantienen que una deuda de obediencia o una deuda de castigo, es en su naturaleza, intransferible; y por su puesto, no fue transferida a Cristo, ni fue pagada por el. Las demandas de la Ley, con respecto a la obediencia y la satisfaccion, en lugar de ser exigidas por Jehova, y cumplidas por Cristo, son, en la opinion de ellos, en un acto de soberanidad divina,"suspendidas, suplantadas, abrogadas." El principal argumento que ellos defienden en contra de la doctrina de una "propia, real, y total satisfaccion" a la justicia divina es, "la exclusion total de la gracia de Dios en cada parte del proceso de salvacion del pecador, con la excepcion de la seguridad de su nombramiento original." La afirmacion de nuestra Confesion, en esta seccion, esta diametralmente opuesta a estos puntos de vista; y para confirmarlo, solo necesitamos referirnos al testimonio explicito de la Escrituras. "Por la obediencia de uno, los muchos seran justificados." - Rom. 5:19. Que prueba mas fuerte que esta, Cristo pago la deuda de obediencia por aquellos que son justificados? "Por su conocimiento justificara mi siervo justo a muchos; y llevara las iniquidades de ellos" - Isa. 53:11. "Cristo nos redimio de la maldicion de la ley, hecho por nosotros maldicion." - Gal. 3:13. Que palabras podrian expresar mas claramente esta afirmacion? Que Cristo sufrio la pena de la ley quebrantada, y asi hizo "una propia, real, y total satisfaccion a la justicia de su Padre," en favor de todos aquellos a quienes el represento, la justificacion de pecadores, "a travez de la redencion que es en Cristo Jesus," esto en lugar de excluirla o obscurecerla, sirve mas bien para ilustrar la gloria de la gracia demostrada. La Gracia es resaltada en la condescendencia de Dios de aceptar una justa garantia; mas aun en proveernos esta seguridad; sobre todo, en darnos su unigenito Hijo para que sea propiciacion de nuestros pecados. Y ademas, esta fe por la cual recibimos la justicia de Cristo es el regalo de Dios. Eph. 2:8. "La gloria del evangelio es que la gracia reina a travez de la justicia. La salvacion es por gracia; pero esta gracia nos llega en un camino de justicia. Para nosotros es gracia; pero esta nos ha sido dada, de tal manera, que todas nuestras deudas fueron pagadas. Esto nos presenta un Dios justo, asi como tambien misericordioso. Justo, en que demanda compensacion completa a la justicia; y misericordioso, porque fue El, y no el pecador, quien proveyo el pago del rescate."

Seccion IV. Dios desde la eternidad decreto la justificación de todos los elegidos; y Cristo en la plenitud del tiempo murio por los pecados de ellos y resucito para su justificacion; sin embargo, no son justificados hasta que el Espiritu Santo, en el tiempo debido les aplica los meritos de Cristo.

Exposicion :

Esta seccion esta dirijida contra el error antinomianista, que dice que los elejidos fueron justificados desde la eternidad, o cuando el precio de su redencion fue pagado por Cristo. Esta admitido que Dios, desde la eternidad, decreto justificar los elejidos, pero hasta el tiempo de su llamado efectivo ellos estan en un estado de ira y condenacion. Efe. 2:3; Juan 3:18. La justicia por la cual ellos son justificados fue perfeccionada en al muerte de Cristo, y la perfeccion de esta fue declarada por su resurreccion, ellos pueden haber dicho, haber sido virtualmente justificados cuando Cristo fue absuelto de todos los cargos en su contra como su representante y leader, sin embargo, ellos no estan justificados en una manera actual y formal, hasta que ellos sean unidos de una manera vital a Cristo por la fe.

Seccion V. Dios continua perdonando los pecados de aquellos que estan justificados; y aunque ellos nunca caeran de su estado de justificacion, ellos por sus pecados podrian caer bajo el desagrado paternal de Dios, y no tener el favor de Dios restaurado, hasta que ellos se humillen asimismos, confiesen sus pecados, ruegen su perdon, y renueven su fe y arrepentimiento.

Exposicion :

Como la justificacion es un acto consumado una sola vez, aquellos que estan justificados no pueden caer en condenacion: "No hay condenacion para aquellos que estan en Cristo Jesus." Rom. 8:1. Los pecados que son cometidos despues, no pueden revocar el perdon que Dios afablemente les concedio; pero estos pecados pueden sujetarlos a ellos a su desagrado paternal, y a una disciplina temporal . Salmos 39:30-33. Aqui podemas senalar la bien conocida distincion entre perdon judicial y perdon paternal. Aunque Dios en su calidad de juez, perdona todos los pecados del creyente, de la manera mas libre e incondicional, en el dia de su justificacion, este perdon el cual como padre, Dios otorga a sus hijos justificados y adoptados, no es,  en general,  una concesion que es dada sin la adecuada preparacion de parte del creyente para que recepcione y mejore este privilegio. Ellos deberian, por lo tanto, humillarse delante de Dios, confesar sus pecados, renovar su fe y arrepentimiento, y diligentemente suplicarle por la remocion de su desagrado paternal, y pedirle por la restauracion de su favor paternal.

Seccion VI.  La justificacion de los creyentes, bajo el Antiguo Testamento fue, en todo concepto, uno y el mismo con la justificacion de creyentes bajo el Nuevo Testamento.

Exposicion:

Lo contrario a esto es mantenido por Socianos. Observaremos solo , ese pensamiento "la justicia de Dios" es ahora claramente manifestada por el evangelio, mas aun esta fue "testificada por la ley y los profetas". Rom. 3:21. Y aquellos, bajo el Antiguo Testamento, quienes  mantenian la justicia por la fe, fueron real y totalmente justificados como los creyentes bajo el Nuevo Testamento. Pablo, esta de acuerdo, aduce que la justificacion de Abraham es un ejemplo del metodo en el cual los creyentes de todas las epocas deben ser justificados. Rom. 4: 3. Aunque la justificacion eterna no llego hasta que Cristo "llego a ser obediente hasta la muerte." No obstante, la eficacia de su muerte se extendio a los creyentes bajo la antigua asi como tambien bajo la presente dispensacion.

Que inestimable y transcendentemente glorioso privilegio es la justificacion! Cuan inefablemente bendecido es el hombre a quien Dios imputa justicia sin obras! Liberado de la horrible maldicion de la ley quebrantada, e introducido a un estado de aceptacion y preferencia con Dios,  toda maldad penable es extraida de la copa de su afliccion, la muerte misma es despojada de su aguijon, y todas las cosas trabajaran juntas para su bien. Vestido con la gloriosa justicia del Redentor, el se presentara firme ante el tribunal de Cristo, mientras que el exaltado Salvador y Juez le expresara su bienvenida al estado final y de eterna bendicion que Dios le ha preparado, diciendo, "Venid, bendecidos de mi Padre, heredad el reino preparado para ustedes desde antes de la fundacion del mundo." Pero donde apareceran los pecadors e impios el dia cuando el Hijo del Hombre se siente en el trono de su gloria, y los llame delante de su augusto tribunal para recibir su sentencia final? Como el impenitente e incredulo, todos aquellos que no se sometieron a la justicia de Dios "llamaran a las montanas y rocas a fin de que caigan sobre ellos y los esconda de la presencia de aquel que esta sentado en el trono, y de la ira del Cordero." Permitan a aquellos que han estado laborando hasta ahora para establecer su propia justicia cesen en su intento, exhortenlos a  desistir de ganar o comprar el regalo de justicia el cual es presentado para su aceptacion en la presentacion del evangelio y mas bien permitanles "luchar" por esta perfecta y gloriosa justicia, y mejorarla por la fe, que es la unica base para todas sus expectaciones de parte de un Dios de gracia ya sea en la dispensacion del tiempo o en la eternidad. Renunciando a toda dependencia de sus propias obras de justicia, dejenlos, como Pablo, desea "Ganar a Cristo, y ser  encontrados en El, no teniendo su propia justicia, sino la que es a travez de la fe en Cristo, la justicia que es de Dios por la fe."